... dedicada al examinador...
Si quieres que haya paz social, la distribución de resultados ha de ser lo más simétrica posible, es decir, la media, mediana, y moda, han de tender a la igualdad y estar situadas +/- en el centro de la distribución, en ese caso de simetría la distribución del resultado en respuestas netas se parecería al resultado en nº de orden.
Para conseguir eso, en una población que se prepara el examen concienzudamente e intensivamente en una buena parte, de su natural sus resultados tenderán a desplazarse a la derecha de forma asimétrica, eso significaría una mala noticia para los nº de orden, ¿por qué?
Porque los resultados en puntos totales se expresan a la diezmilésima, para evitar al máximo los empates, y sin embargo los nº de orden se expresan de uno en uno. Ello da lugar a dos geometrías de distribución distintas.
Para que las dos distribuciones tiendan a una misma geometría, simétrica en su centro y platicúrtica, no le queda otra al examinador que poner un examen, no solo bien construido, sino además que sea proporcionado en su dificultad al conocimiento de los examinandos, a quienes no conoce. Más difícil para la mitad de los presentados que sea han preparado mejor y que traen la mochila más cargada, y menos para la otra mitad que la trae menos, de tal forma que esa primera mitad desplace de forma homogénea y centrada a la otra mitad. El resultado sería una distribución +/- en forma de arco carpanel (en la gráfica el MIR 2009/2010)
Si la distribución te sale con hombreras conseguirás alterar la paz social, ¿por qué?
Porque media, mediana y moda, estarán desplazas hacia la parte derecha, lo que significa peores nº de orden, con respuestas netas centradas, que si fuera simétrica en su centro.
Ese sería el arte del examinador. Conseguir que la mediana de respuestas netas de la distribución de resultados, se correspondiera aproximadamente con la mediana de nº de orden (Nn*0,50), siendo Nn el número de presentados al examen. Mediana y media coinciden en la distribución de nº de orden, que además es simétrica.
PD.- Los preparadores "juegan" a adivinar el examen, y los preparandos les siguen ese "juego". Lo hacen con una metodología, no solo repasando toda la materia, sino priorizando la misma, en función de lo más preguntado en años anteriores, con un plan de trabajo diario, terminando la semana con el entrenamiento de una simulacro, y un día de descanso. ¿Por qué?
Porque durante la preparación el tiempo es el bien más escaso.
En ese "juego", los preparadores se expían unos a otros para ver donde fallan los pupilos de los otros centros de preparación. Lo hacen a través de la corrección del examen en el postMIR, e incluso una de ellas lo ha comenzado a hacer en el preMIR, en un intento, macrosimulacro lo llaman, en el que ofrecen compararte con los demás. Pero resulta que te piden el nombre de la academia en la que te preparas. ¿Por qué?
Imagínate que los que corrigen el examen en sus plataformas, sea en el preMIR o en el postMIR, fallan más o menos preguntas de una asignatura determinada en una academia determinada.
Eso tendría un significado, tanto como que el profesor de esa asignatura, en esa academia determinada, hizo agua si sus alumnos fallan más por ejemplo que los de otra. De esa forma se dan cuenta los baches que tienen que reparar.
Ya ves que aquí el que no corre vuela. Te venden la moto, para atraerte hacia su corrección, con el eslogan de que cuantos más participen más se parecerá la predicción de tu nº de orden al resultado final. Tururú. Tararí que te vi. Eso sería si la muestra que participa fuera aleatoria respecto de los que se presentarán o se hayan presentado al examen, sean en el preMIR o en el postMIR.
Pero por más que aumente la muestra de corrección no será aleatoria respecto de la población Nn y por tanto no terminará pareciéndose al resultado final de ese año concreto. Cuanto más alto sea tu percentil en los simulacros durante tu preparación más se acercará al final y al revés de forma descendente.
Eso es así y seguirá siendo así. Pura naturaleza humana. Tenderán a participar más los que más esperan según sientan como les ha ido, y la revés, menos cuanto más piensen que han pinchado.
El sesgo de corrección en las muestras, por más amplias que sean, es brutal, Encima ese sesgo no es exactamente igual de un año para otro. Pasa lo mismo que durante la preparación en los simulacros.
Suerte el sábado, que también hace falta. Al menos mientras la nota final se determine con un solo examen. Con cuatro exámenes ese azar teórico quedaría reducido a cero. Tu puntuación sería la media de las puntuaciones de los cuatro.
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