Cada maestrillo tiene su librillo...

... solo es necesario observar y ver que no existe un lenguaje común, una nomenclatura común, y una disciplina académica común para poder entenderse entre todos los interesados en las pruebas de formación sanitaria especializada. No solo los examinados, sino también el resto

Esa responsabilidad le corresponde sin duda, desde mi punto de vista, a la ausencia de liderazgo del MSSSI por no haber seguido publicando la evaluación del examen desde 1993 en el que se hizo pública la primera y única evaluación de los exámenes de varias convocatorias anteriores conforme a la teoría clásica de los test (TCT).

Así pues no es de extrañar que cada maestrillo haya seguido y siga su librillo.

Solo se habla del parámetro dificultad y todo son sensaciones y no mediciones conforme a la literatura.

No es una queja sino un relato en el que me incluyo. Hasta que no leí al artículo de Bonillo yo también había desarrollado mi propio librillo.

Bonillo pidió los datos de las matrices de los resultados y se los facilitó el MSSSI.

Un servidor no se los ha pedido nunca a título personal porque si me los negara ipso facto lo anunciaría y cerraría el garito. Sin embargo he pedido hasta la saciedad que los ponga a disposición de todos, por supuesto anonimizados, acompañados de la primera plantilla, no la provisional, sino la anterior, la del examinador. ¿Con qué objeto?

Con el de conseguir no solo evaluar el examen a posteriori, sino que el propio MSSSI pueda hacerlo antes de las anulaciones. No solo le serviría para debatir si se anulaba o no, sino sobre todo para justificar la causa de las anulaciones conforme al consenso de una disciplina académica sobre el tema. No se puede justificar solo por las impugnaciones porque las mismas están claramente sesgadas en una dirección. Veamos un ejemplo:

Son datos de una muestra de exámenes corregidos no aleatoria. No son muchas preguntas respecto de las 235. Solo seis. Lo pongo sin los nº de las preguntas porque no quiero atizar. Entre otras cosas porque seguramente si en lugar de ser los datos de una muestra sesgada fueran los datos de la población de examinados entiendo que disminuirían, ya que la discriminación es una correlación entre conocimiento y resultados. En las muestras de corrección el sesgo está a favor de las expectativas. Son las preguntas que hoy por hoy discriminan negativamente con dos instrumentos de medida.

Entiendo que para poder entenderse entre todos los interesados es necesario tener un libro de normas común, un libro de lenguaje común. No hay que inventar ninguno, ya existe una disciplina académica sobre el tema, se llama Psicometría. Solo es cuestión de que el MSSSI la vuelva a utilizar, ya cuando el análisis se haga común y el resto seguirá el patrón. De lo contrario cada maestrillo seguirá con su librillo y el resultado será un guirigay de sensaciones.

Mi pregunta al MSSSI... ¿por qué no reanudáis lo que hicisteis en 1993?

Para hacerlo no es necesario cambiar las normas que rigen la prueba. Solo se trataría de hacer un Informe técnico para ayudar en el proceso de anulación sobre el cuánto mide el instrumento de medida lo que pretende medir. Complementa otros informes periciales sobre qué se ha preguntado y cómo se ha preguntado.