... editada por primera vez el día 07/05/2018... posteriormente se incluyeron los datos del MIR 2017/2018 al alba del día 11 de mayo de 2018...
Nota.- En la primera tabla podemos observar como los primeros años hasta el MIR 2005/2006 los nº de orden fueron más bajos porque se presentaban muchos menos aspirantes, no solo porque egresaban del orden de 2.000 menos que en la actualidad, sino porque la demanda exterior era meramente testimonial.
Esta última se comenzó a disparar a partir de dicha convocatoria, ante la falta de presión de la demanda interior y el aumento de la oferta de plazas. Todo ello motivado por el aumento de población y de la renta disponible, consecuencia ambas del boom económico. Eso tuvo su reflejo en los últimos nº de orden de la adjudicación de las plazas de Familia. No solo eso sino que hubo años en que quedaron plazas desiertas.
Consecuencia de ello en el curso 2006/2007 se moduló el numerus clausus de entrada en las facultades de Medicina aumentando la demanda efectiva de ingreso y aumentando a la vez las notas de corte de entrada.
Mientras esa modulación tardaría en entrar en acción seis años. Justo los que duraba la licenciatura y actualmente el grado. En ese tiempo pinchó la burbuja económica y la tortilla se dio la vuelta. Los recortes económicos para hacer frente a la crisis afectaron de lleno al sector. Uno de los recortes fue la reducción de la oferta. Otro el aumento de la precariedad en el empleo. Dos modulaciones previstas en la DTQ del Real Decreto 183/2008 se pusieron en marcha. La posibilidad de establecer una nota de corte para obtener nº de orden y poder optar a elegir plaza o no. Un % de cupo de extracomunitarios por debajo del 10 %. Visiblemente entraron en acción en la convocatoria 2012/2013 con el 30 % de la media de los diez mejores exámenes como nota de corte y el 8 % de la oferta de plazas como cupo. Se preparaba ya el momento cercano del aumento de recién egresados consecuencia de la modulación del numerus clausus.
Así pues, se juntó el hambre con las ganas de comer, estallido de la crisis y aumento de recién egresados. Eso también se refleja en la tabla con la variación del último nº de orden con el que se comenzaron a elegir las plazas de Familia hasta hoy. Es decir, elegir Familia en sus últimas plazas se tornó más caro. Ya nadie ha podido elegir sus últimas plazas con nota negativa. Ni siquiera con la nota de corte superada en las últimas convocatorias.
La situación actual, sin haberse recuperado todavía la oferta de plazas, en los niveles máximos de la misma que se dieron en la convocatoria 2009/2010, y habiendo aumentando la demanda presentada como española, ha aumentado la presión selectiva, especialmente los presentados con baremo de notable entre los recién egresados.
La demanda efectiva exterior, la que se adjudica plaza, sea todo lo alta que sea la demanda admitida de la misma, está controlada por dos de las modulaciones, la nota de corte que controla a los no afectados por el cupo, y el % del cupo para los afectados. El resultado efectivo no supera el 10 % de las plazas adjudicadas. Así pues solo resta que la oferta se recupere a los niveles de la convocatoria 2009/2010 en que rondó las 7.000 plazas.
Familia es la heredera de los médicos de cabecera. Médicos generales que ejercían sin especialización previa, cosa que cambió a partir de 1995. Dicha especialidad es el cupo mayoritario en una oferta total de plazas en una prueba de libre concurrencia, única, anual y nacional. La asignación de sus plazas se celebra con una sola lista de nº de orden a la vez que el resto. Así pues su elección no solo depende de la voluntad de los que la eligen sino de otras variables colaterales que influyen en ello, entre las que destaca la oferta del resto de plazas y su ratio con Familia.
Así pues, no tienen ni pies ni revés las comparaciones que se hacen de su elección con las del resto de especialidades, ni por arriba ni por el centro, ni por abajo. Son cosas distintas, y ya se sabe que no se deben de comparar cosas distintas.
La última frase anterior motiva esta entrada y su primera tabla. Por muy visual que pueda parecer no se deben de comparar poblaciones de tamaño diferente con intervalos fijos de nº de orden de esas poblaciones. Es decir, cuando se compara las plazas que se eligen de Familia hasta el nº 1000-2000-3000-4000... no se ha caído en la cuenta que en poblaciones de tamaño diferente solo el nº 1 es equivalente entre unas y otras. Para comparar poblaciones de distinto tamaño hay que recurrir a los percentiles de nº de orden que sí con comparables, y que curiosamente se desarrollaron para resolver esa cuestión.
Asunto que ha quedado reflejado en la entrada anterior que se puede ver aquí.
El mayor cambio que se ha dado en la elección de Familia no ha sido noticia para nadie. Ni para los que representan a la propia especialidad ni para los medios. Las plazas de Familia, en los "años de la alegría" en palabras de la profesora Beatriz González López.-Valcárcel, fueron elegidas hasta en su mitad por la demanda exterior por falta de demanda interior. Incluso algunos años quedó la oferta en parte desierta. Desde que se pusieron en marcha las modulaciones, y especialmente en los tres últimos años, más del 95 % de sus plazas han sido elegidas por presentados como españoles. ¿Es eso una mala noticia para el SNS y especialmente para el SNS de la España interior?
Por lo tanto fervor sí, pero mayor rigor también, tanto por unos como por otros. El rigor se deriva de la circunstancia de que Familia se elige a la vez y dentro del conjunto total de la oferta, y dentro de esa oferta Familia es mayoritaria. Ello es consecuencia de participar en una prueba de libre concurrencia anual y única, no solo en el examen y en la lista de nº de orden, sino especialmente en los Actos de Asignación de Plazas, en los que la demanda selectiva por parte de los aspirantes está condicionada en cada especialidad por su oferta y por las de las demás, y no solo por su demanda. Si se ofertaran solo cien plazas de Familia no terminaría en el nº de orden en el que termina.
Si se observa la tabla se verá la evolución de su mediana (P50) como una radiografía de lo que se expresa en el texto de la entrada. Más aún los estadísticos extremos, la desviación típica y el rango.
Para rematar la faena pongamos un ejemplo real para ratificar algunas de las reflexiones. A una comunidad autónoma, no es necesario mencionar su nombre, le fueron desacreditadas aproximadamente el 50 % de las plazas de formación de Familia de un año para otro. Pues bien, con menor oferta de plazas de la especialidad y parecida demanda de plazas por la misma ¿qué pasó?... obviamente ahora es de las primeras de la clasificación. Lo que significa que a igual demanda y menor oferta, el coste del nº de orden se posiciona al alza.
Corolario final.- Vamos, que mientras se elijan las plazas por nº de orden en todas las especialidades en el mismo Acto de Asignación de Plazas... lo primero es y será poder (la prueba es selectiva para normalizar u ordenar para elegir plaza de forma prevalente, ni más ni menos)... lo segundo es y será querer elegir una de las plazas entre las que quedan cuando toca por nº de orden (no solo la prueba es selectiva sino que también lo es la demanda). Esas dos variables, lo primero y lo segundo, gobiernan la prueba.
En definitiva, la naturaleza de la prueba es casar la oferta y la demanda de forma ordenada. Todo ello conforme a las normas contenidas en las Bases de cada convocatoria. Por eso la primera lección de la preparación de la prueba es que los preparandos lean, por la cuenta que les trae, las Bases de la convocatoria. Allí están resueltas todas las dudas sobre las normas que la rigen y parece de cajón que se deben de conocer antes de comenzar.
Todo ello, naturalmente, dejando a salvo mejor criterio, y otras variables en las que no entro ni entraré por no ser de mi jardín.
Nota.- En la primera tabla podemos observar como los primeros años hasta el MIR 2005/2006 los nº de orden fueron más bajos porque se presentaban muchos menos aspirantes, no solo porque egresaban del orden de 2.000 menos que en la actualidad, sino porque la demanda exterior era meramente testimonial.
Esta última se comenzó a disparar a partir de dicha convocatoria, ante la falta de presión de la demanda interior y el aumento de la oferta de plazas. Todo ello motivado por el aumento de población y de la renta disponible, consecuencia ambas del boom económico. Eso tuvo su reflejo en los últimos nº de orden de la adjudicación de las plazas de Familia. No solo eso sino que hubo años en que quedaron plazas desiertas.
Consecuencia de ello en el curso 2006/2007 se moduló el numerus clausus de entrada en las facultades de Medicina aumentando la demanda efectiva de ingreso y aumentando a la vez las notas de corte de entrada.
Mientras esa modulación tardaría en entrar en acción seis años. Justo los que duraba la licenciatura y actualmente el grado. En ese tiempo pinchó la burbuja económica y la tortilla se dio la vuelta. Los recortes económicos para hacer frente a la crisis afectaron de lleno al sector. Uno de los recortes fue la reducción de la oferta. Otro el aumento de la precariedad en el empleo. Dos modulaciones previstas en la DTQ del Real Decreto 183/2008 se pusieron en marcha. La posibilidad de establecer una nota de corte para obtener nº de orden y poder optar a elegir plaza o no. Un % de cupo de extracomunitarios por debajo del 10 %. Visiblemente entraron en acción en la convocatoria 2012/2013 con el 30 % de la media de los diez mejores exámenes como nota de corte y el 8 % de la oferta de plazas como cupo. Se preparaba ya el momento cercano del aumento de recién egresados consecuencia de la modulación del numerus clausus.
Así pues, se juntó el hambre con las ganas de comer, estallido de la crisis y aumento de recién egresados. Eso también se refleja en la tabla con la variación del último nº de orden con el que se comenzaron a elegir las plazas de Familia hasta hoy. Es decir, elegir Familia en sus últimas plazas se tornó más caro. Ya nadie ha podido elegir sus últimas plazas con nota negativa. Ni siquiera con la nota de corte superada en las últimas convocatorias.
La situación actual, sin haberse recuperado todavía la oferta de plazas, en los niveles máximos de la misma que se dieron en la convocatoria 2009/2010, y habiendo aumentando la demanda presentada como española, ha aumentado la presión selectiva, especialmente los presentados con baremo de notable entre los recién egresados.
La demanda efectiva exterior, la que se adjudica plaza, sea todo lo alta que sea la demanda admitida de la misma, está controlada por dos de las modulaciones, la nota de corte que controla a los no afectados por el cupo, y el % del cupo para los afectados. El resultado efectivo no supera el 10 % de las plazas adjudicadas. Así pues solo resta que la oferta se recupere a los niveles de la convocatoria 2009/2010 en que rondó las 7.000 plazas.
Familia es la heredera de los médicos de cabecera. Médicos generales que ejercían sin especialización previa, cosa que cambió a partir de 1995. Dicha especialidad es el cupo mayoritario en una oferta total de plazas en una prueba de libre concurrencia, única, anual y nacional. La asignación de sus plazas se celebra con una sola lista de nº de orden a la vez que el resto. Así pues su elección no solo depende de la voluntad de los que la eligen sino de otras variables colaterales que influyen en ello, entre las que destaca la oferta del resto de plazas y su ratio con Familia.
Así pues, no tienen ni pies ni revés las comparaciones que se hacen de su elección con las del resto de especialidades, ni por arriba ni por el centro, ni por abajo. Son cosas distintas, y ya se sabe que no se deben de comparar cosas distintas.
La última frase anterior motiva esta entrada y su primera tabla. Por muy visual que pueda parecer no se deben de comparar poblaciones de tamaño diferente con intervalos fijos de nº de orden de esas poblaciones. Es decir, cuando se compara las plazas que se eligen de Familia hasta el nº 1000-2000-3000-4000... no se ha caído en la cuenta que en poblaciones de tamaño diferente solo el nº 1 es equivalente entre unas y otras. Para comparar poblaciones de distinto tamaño hay que recurrir a los percentiles de nº de orden que sí con comparables, y que curiosamente se desarrollaron para resolver esa cuestión.
Asunto que ha quedado reflejado en la entrada anterior que se puede ver aquí.
El mayor cambio que se ha dado en la elección de Familia no ha sido noticia para nadie. Ni para los que representan a la propia especialidad ni para los medios. Las plazas de Familia, en los "años de la alegría" en palabras de la profesora Beatriz González López.-Valcárcel, fueron elegidas hasta en su mitad por la demanda exterior por falta de demanda interior. Incluso algunos años quedó la oferta en parte desierta. Desde que se pusieron en marcha las modulaciones, y especialmente en los tres últimos años, más del 95 % de sus plazas han sido elegidas por presentados como españoles. ¿Es eso una mala noticia para el SNS y especialmente para el SNS de la España interior?
Por lo tanto fervor sí, pero mayor rigor también, tanto por unos como por otros. El rigor se deriva de la circunstancia de que Familia se elige a la vez y dentro del conjunto total de la oferta, y dentro de esa oferta Familia es mayoritaria. Ello es consecuencia de participar en una prueba de libre concurrencia anual y única, no solo en el examen y en la lista de nº de orden, sino especialmente en los Actos de Asignación de Plazas, en los que la demanda selectiva por parte de los aspirantes está condicionada en cada especialidad por su oferta y por las de las demás, y no solo por su demanda. Si se ofertaran solo cien plazas de Familia no terminaría en el nº de orden en el que termina.
Si se observa la tabla se verá la evolución de su mediana (P50) como una radiografía de lo que se expresa en el texto de la entrada. Más aún los estadísticos extremos, la desviación típica y el rango.
Para rematar la faena pongamos un ejemplo real para ratificar algunas de las reflexiones. A una comunidad autónoma, no es necesario mencionar su nombre, le fueron desacreditadas aproximadamente el 50 % de las plazas de formación de Familia de un año para otro. Pues bien, con menor oferta de plazas de la especialidad y parecida demanda de plazas por la misma ¿qué pasó?... obviamente ahora es de las primeras de la clasificación. Lo que significa que a igual demanda y menor oferta, el coste del nº de orden se posiciona al alza.
Corolario final.- Vamos, que mientras se elijan las plazas por nº de orden en todas las especialidades en el mismo Acto de Asignación de Plazas... lo primero es y será poder (la prueba es selectiva para normalizar u ordenar para elegir plaza de forma prevalente, ni más ni menos)... lo segundo es y será querer elegir una de las plazas entre las que quedan cuando toca por nº de orden (no solo la prueba es selectiva sino que también lo es la demanda). Esas dos variables, lo primero y lo segundo, gobiernan la prueba.
En definitiva, la naturaleza de la prueba es casar la oferta y la demanda de forma ordenada. Todo ello conforme a las normas contenidas en las Bases de cada convocatoria. Por eso la primera lección de la preparación de la prueba es que los preparandos lean, por la cuenta que les trae, las Bases de la convocatoria. Allí están resueltas todas las dudas sobre las normas que la rigen y parece de cajón que se deben de conocer antes de comenzar.
Todo ello, naturalmente, dejando a salvo mejor criterio, y otras variables en las que no entro ni entraré por no ser de mi jardín.
PD1.- Me acordé de ti...
PD2.- Para ver con mayor claridad el tablón haz clik con el botón izquierdo encima del mismo, una vez se ha hecho más grande pon el ratón encima y aprieta el botón derecho del ratón. En el cuadro de diálogo que te sale haz clik en el que dice Abrir imagen en una pestaña nueva. Una vez se ha abierto una pestaña nueva en la parte superior, ábrela y pon el ratón encima. Te saldrá el signo (+) que significa lupa para aumentar el tamaño del tablón, haz clik con el botón izquierdo y tendrás mucho más legible el contenido del mismo.
PD2.- Para ver con mayor claridad el tablón haz clik con el botón izquierdo encima del mismo, una vez se ha hecho más grande pon el ratón encima y aprieta el botón derecho del ratón. En el cuadro de diálogo que te sale haz clik en el que dice Abrir imagen en una pestaña nueva. Una vez se ha abierto una pestaña nueva en la parte superior, ábrela y pon el ratón encima. Te saldrá el signo (+) que significa lupa para aumentar el tamaño del tablón, haz clik con el botón izquierdo y tendrás mucho más legible el contenido del mismo.
No se puede explicar más con menos.
ResponderEliminarComo siempre, mi agradecimiento por tu acertado análisis que, con tu permiso, compartiré en linkedin.
ResponderEliminarUn saludo