lunes, 13 de mayo de 2013

¿EXISTE ALTERNATIVA AL MIR?

Entrada editada el 9/02/2013...

No, no existe.

El MIR es una prueba de libre concurrencia para ordenar el acceso a la formación especializada.

Cuando se creó, se eligió la libre concurrencia entre médicos nacionales, y no el continuo grado-postgrado, es decir, no una prueba específica que ordenara solo a los recién egresados de las facultades españolas, podía haberse hecho pero no se hizo, y así ha seguido a lo largo de su periplo. 

Se hizo así de su natural, por dar la oportunidad a todos los que no se habían especializado hasta entonces y porque la oferta de plazas era muy inferior a la demanda, a la demanda no satisfecha anteriormente y a la nueva de recién egresados, naturalmente porque había que proceder a ordenar de forma prevalente, entre tantos, para elegir con un orden las plazas de formación.

Entonces no era obligatoria la especialización para el ejercicio de la medicina general y sí para la especializada. Los hospitales habían crecido en número y camas, y se hizo necesario establecer un orden racional y objetivo entre los demandantes porque eran más que la oferta. Transcurrieron dos decenios así. 

El año 1995 se traspone la directiva europea que obliga a la especialización para el ejercicio de la medicina general en el SNS, esa circunstancia hace que se cree una prueba específica, exclusiva para Familia, además de la general que también ofertaba plazas de Familia. Ámbas pruebas convivieron durante seis años hasta que se consideró que la específica había cumplido su cometido. 

El establecimiento del numerus clausus de acceso al grado, la prueba específica, el consiguiente aumento de la oferta de plazas de formación, y el transcurso del tiempo, metabolizaron el exceso de producción  de médicos y acercaron la demanda y la oferta. 

El boom económico vivido a caballo de los últimos años del decenio de los noventa y la mitad del siguiente, el no ajuste del numerus clausus al alza desde que se instauró, y el aumento de la oferta, terminaron con el equilibrio conseguido de 1995 hasta el 2000, y desajustaron la oferta y la demanda en los años siguientes, pero justo al revés de lo que ocurrió en el decenio de los ochenta.

La regulación de la prueba fue muy anterior al marco actual, la Ley 44/2003 de ordenación de las profesiones sanitarias,  y era tributaria de la necesidad expuesta en los primeros párrafos.

La Ley 44/2003 enmarca la prueba en su artículo 22 y la sigue haciendo tributaria de la libre concurrencia. No cambió eso a pesar de que los tiempos habían cambiado, nadie se planteó hacer la prueba solo para los recién egresados españoles. Antes incluso, se había ya abierto la prueba a los médicos extranjeros, afectados o no por el cupo, como consecuencia de la apertura de España al exterior y la firma de tratados culturales internacionales. Es decir, la prueba después de su última regulación, siguió siendo de libre concurrencia, nacional e internacional. La primera vez que se reguló el cupo tenía un límite máximo del 5% de las plazas.

El principio natural de satisfacer la necesidad del continuo grado-postgrado de los egresados nacionales, no figura por ningún lado, ni cuando se creó la prueba, por el desajuste de la demanda con la oferta, ni después, ya que se reguló la concurrencia de extranjeros y no se han regulado, específicamente, límites a las diferentes casuísticas de la recirculación, solo la renuncia previa si no has terminado la residencia y el volver a hacer la misma especialidad.

El primer año del que tengo constancia del acceso de extranjeros a plazas de formación es en la convocatoria 1990/1991 exactamente 16 plazas (el 0,46% de las ofertadas), que llegó a su máximo (el 34,12% de las ofertadas) en la convocatoria 2009/2010  y comenzó a disminuir desde entonces hasta el 25,64% de las plazas ofertadas el año pasado, como consecuencia de la medidas de modulación tomadas en 2008 y 2010. 

Sirva decir que en el año 1984/1985  la relación demanda/oferta fue de 14,86 demandantes por plaza y que pasó, disminuyendo poco a poco, a 3,37 en el año 1995/1996. Esa disminución fue progresiva y pareja a las causas explicadas más arriba. Durante ese tiempo no se tomó ninguna medida para ajustar el numerus clausus, a pesar de esa disminución.

Así llegamos a la convocatoria 2001/2002 en la que se unificaron la prueba específica y la general, y la relación demanda/oferta de esa convocatoria fue de 1,93 demandantes por plaza, y nadie movió un dedo para alarmarse y ajustar el numerus clausus. 

Ahí se atravesó la línea roja de 2 demandantes por plaza, necesaria para cubrir toda la oferta porque la demanda se ha vuelto selectiva. Ahí comenzó a gestarse el desbarajuste que vendría después. La oferta de plazas creciendo (aquí se puede decir lo que cada uno crea o quiera, que eran o no necesarias, que las CCAA convocaban de más porque era mano de obra barata, etc.) y la demanda nacional menguando. El resultado ya se conoce por todos, 42.000 títulos extranjeros homologados en un decenio, el mismo número que egresados españoles.

La relación demanda/oferta todavía disminuyó más llegando a su mínimo el año 2003/2004 con 1,54 que, ojo, todas las cifras que he dado de índices de demanda por plaza son de inscritos, si hablamos de los presentados al examen y que obtuvieron nº de orden, y por tanto son potenciales electores, son todavía menores, quedando ese 1,54 de inscritos por plaza en 1,34 electores por plaza, y que llegó a 1,33 la convocatoria 2005/2006 que fue la primera que quedaron plazas desiertas, exactamente 87, la siguiente 2006/2007 quedaron 244 plazas desiertas, y la siguiente 2007/2008 quedaron 301 plazas desiertas, las alarmas habían saltado.  

El numerus clausus se comenzó a mover en el curso 2005/2006 y llegamos tarde. Ahora, con la crisis, se ha dado la vuelta la tortilla y nos ha vuelto a pillar desprevenidos, pero al revés, aumentando el numerus clausus del grado y disminuyendo la oferta de plazas MIR de postgrado. ¿Tenemos remedio?, entre todos la tenían y ella sola se murió, echándose unos a otros la culpa.

A pesar de todo, los índices de este año son de 2,19 inscritos por plaza, que se han quedado en 2,14 admitidos por plaza, que se quedarán en 1,44 electores por plaza como consecuencia de la modulación de la nota de corte, y en 1,21 electores por plaza como consecuencia de la modulación del cupo de extranjeros. Todo porque la demanda selectiva sigue firme y la oferta ha bajado durante tres convocatorias seguidas con los ajustes económicos.

Tendiendo hacia un equilibrio, en el marco de la Ley, y de las modulaciones reglamentarias establecidas.

Y ahora que estamos camino de conseguirlo, ¿queremos cambiarlo?, ¿alguien piensa que hay alternativa al MIR?, ¿cómo?, ¿cuál?.

El proyecto de Real Decreto sobre la troncalidad, es en realidad mucho más que eso, en su último borrador (11/1/2013), pretende regular la mayor parte de los mandatos de la ley 44/2003 de ordenación de las profesiones sanitarias, algo que todavía queda por hacer. 

La Ley es de rango superior a los reglamentos y nadie ha dicho, que yo sepa, que haya que cambiarla, por tanto el futuro Real Decreto pretende solo su regulación, y ahí está el artículo 22 de la Ley que dice que es una prueba anual, nacional y de libre concurrencia, y eso no lo puede cambiar el Real Decreto, puede regular pero no cambiar, y toda la regulación que he leído en ese proyecto, sobre el MIR, consagra los cambios realizados para modular la prueba, es decir la Orden de 27 de junio de 1989 y sus modificaciones posteriores, la DTQ del RD 183/2008  y la Orden SAS/2158/2010, y además los iguala en el resto de profesiones sanitarias, ni más ni menos.

Hemos comenzado a recoger los frutos, ¿y queremos cambiar?, ¿el qué?. Claro que hay cosas que hacer con el examen MIR, pero tampoco se puede decir que no se hagan, otra cosa es que no se publiquen. Entiendo que se quiera guardar el santa santorum de la cocina del examen, pero hoy no es de recibo que no se evalúe externamente y no se publique esa evaluación. El Ministerio ha de adelantarse a ello y existen profesionales y herramientas para hacerlo, todo ello sin afectar al debido sigilo en ese santa santorum donde se decide el examen. Sirviendo dicha medida,  además de para justificarlo ante los administrados e interesados, para mejorar la calidad de las preguntas. Estoy convencido que se hace solo que no se publica.  

Los ministerios de Educación y de Sanidad, están obligados a coordinar, porque son los gestores de las pruebas, pero no fijan ni el numerus clausus ni la oferta de plazas, no es su competencia. Vaya papelón que tienen, recibir todas las críticas y tener las manos poco menos que atadas. Esas competencias están transferidas y ellos, que gestionan las pruebas a dúo, les queda el papel de templar gaitas.

Pero volvamos al principio, ¿existe alternativa al MIR?, simulemos.

Adelantamos el examen a la terminación del curso como se ha dicho alguna vez, vale, todo el que quiera sacar buen nº de orden, por las razones que sean,  no se presentará recién egresado para prepararse para la ocasión, eso es lo que se conseguiría, en lugar de siete meses de tiempo de preparación serán doce. Si quieres arroz, taza y media. Ese asunto dejaría peor lo que se querría evitar con ello. Mala idea.

Vale, simulemos que ordenamos por baremo académico sin realizar el examen como solución al problema, ¿qué pasaría?, imposible de llevar a cabo al ser la prueba de libre concurrencia, no se podría hacer con los de promociones anteriores, no sería de recibo llevar esa mochila del baremo académico de forma permanente sin actualización previa hasta el fin de tus días. ¿Y los extranjeros?, ¿ordenamos igual sus baremos académicos?, ¿sin siquiera un examen MIR?. Ahora se homologa el título sin examen pero por lo menos se han de examinar del MIR. Mal asunto esta propuesta. 

Vale, simulemos otra alternativa. Garanticemos el continuo grado-postgrado nacional de forma radical, es decir una prueba específica solo para los recién egresados españoles que tendrían garantizada plaza igualando la oferta y la demanda y solo sería cuestión de ordenarlos, bien con un examen, no hay manera de librarse del mismo, o bien ordenando por el baremo académico. ¿Con qué baremo?, ¿en base cuatro que prima los saltos de nota?, ¿en base diez que no premia nada, sino que simplemente le da a cada uno lo suyo?, ¿entran o no entran las matrículas de honor que no está reglamentado que se obtengan mediante examen público entre sobresalientes, o se cuentan como sobresalientes sin más con su nota?, ¿ponderamos la nota de cada aspirante con la media de su facultad y con la media nacional o tal cual sin ponderar como si todas las facultades evaluaran igual?. Ya está el lío armado. Para esta alternativa hay que modificar la ley 44/2003 en su articulado, y eso no es un reglamento, como un Real Decreto, una Orden ministerial, o la Convocatoria, que se cuecen en el Ministerio, eso es harina de otro costal, ha de ir al parlamento. Mal asunto, mala ocurrencia.

¿Otras alternativas que garanticen la paz social entre el colectivo?, no encuentro ninguna, de ahí la frase tan taxativa de la primera línea, no hay alternativa.

Esta es la paradoja del MIR, consume casi un año de esfuerzo personal e ingentes recursos económicos, ni más ni menos que para garantizar un orden objetivo (medible y justificable) para el acceso a la formación sanitaria especializada. El procedimiento de medición está regulado previamente con normas y con criterio, y garantiza la paz social entre el colectivo al que va dirigido. ¿Quién querría cambiar una cosa así?

Para colmo el examen, sin pretenderlo, se ha convertido en una prueba de acreditación del sistema educativo previo a la prueba, que ha terminado influyendo en el mismo. Pero de eso no se publican resultados previamente acreditados. Este asunto ha sido estudiado y publicado en otras pruebas del mismo orden de otras países. 

Los resultados sobre las facultades los conoce el Ministerio, y no me refiero precisamente a los cien primeros nº de orden que son los que se publican, que por cierto no es un criterio serio de medición. En el modelo 790 de inscripción a las pruebas, figuran los datos de la facultad y año de expedición del título, para poderlo estudiar. De los centros preparadores nadie conoce los resultados ciertos, solo se sabe lo que publica cada uno de ellos de sí mismos, y  solo uno los acredita ante notario una vez que los resultados son publicados por el Ministerio levantando acta de los mismos.

15 comentarios:

  1. Difícil pregunta la que acabas de plantear, Gangas. ¿Alternativa al MIR? debería haberla y si algún día se me ocurre la presentaré en el ministerio. Pero la injusticia del MIR radica en la cantidad de miles de médicos frustrados que formamos. No todo el mundo tiene ni el tiempo, ni la capacidad, ni el dinero, ni el expediente para colocarse entre los 2000 primeros y poder optar por su especialidad, por su vocación y se ve obligado a tener que acabar haciendo una especialidad que odia con todo lo que ello implica. Alguien insatisfecho en su trabajo se traduce en un mal profesional. En el siglo en el que andamos donde cada vez se le está dando más importancia a la inteligencia emocional, dejando de lado el típico coeficiente intelectual por no abarcar todo lo que una persona pueda dar de si, el MIR no es más que un fiel reflejo de creencias antiguas donde el más inteligente era aquél capaz de resolver problemas matemáticos. El MIR se tendría que adaptar a los nuevos tiempos, lo mismo que le exigimos a la iglesia, a la monarquía y a todas aquellas cosas retrógradas. Los exámenes son necesarios e imprescindibles, pero cosa diferente son sus formas.

    La pregunta sería ¿Qué tipo de médicos queremos formar? y a partir de ahí buscar soluciones al respecto. Son muchos años ya los que llevo ejerciendo como médico y he podido darme cuenta como un gran porcentaje de los médicos con peores resultados en el MIR eran médicos más completos: empatía con el paciente, implicación en sus problemas, lucha por sacar hacia delante la enfermedad de sus pacientes, motivados en cuanto a su propia formación para seguir creciendo e incluso implicados en la gestión de recursos del sistema sanitario. En cambio, los mejores números del MIR, no en todos los casos, muchas de estas cosas se pierden. La primera la ausencia de empatía, básica y fundamental para una adecuada relación médico-paciente, no hay una lucha por curar al paciente sino por vanagloriar el ego, inmersos en estar presentes en mil estudios para mejorar el C.V. y, sin hablar de la utilización de recursos innecesarios (menor conciencia social).
    Pero el MIR no discrimina todas estas cosas que considero son fundamentales en la práctica diaria. La mayoría de las personas, en los momentos en los que su salud se ve truncada, buscan aquél médico que sea capaz a la vez de sanar de acompañarlo en su enfermedad ¿lo mide ésto el MIR? No. El MIR solo mide la capacidad de retener un cúmulo de información que a día de hoy dispones en cualquier web.
    ¿Se puede permitir el sistema sanitario tener médicos frustrados después de la inversión económica que hace con ellos? Me parece un derroche de dinero increible.
    Habría que buscar un método que englobara todas estas cosas y más para poder formar grandes médicos.
    Saludos

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    1. Gracias por tu opinión.

      Hay mediciones, que siendo deseables, son muy difíciles de hacer con rigor, es decir, con método objetivo y aceptado académicamente (si quieres científicamente) y socialmente.

      Los test son un instrumento aceptado dentro del mundo académico para medir muchos aspectos dentro de la psicología y del rendimiento académico.

      Tienen su disciplina o doctrina académica y sus herramientas estadísticas para el cálculo de su fiabilidad, dificultad y capacidad de discriminación, toso eso es lo cuantitativo del MIR.

      Tu planteas el aspecto cualitativo del MIR y ese también se lo plantea el MIR y tiene su parte de doctrina, todo lo referido a la validez de la prueba, lo que se quiere medir, el saber médico, cómo se quiere medir, con preguntas de respuesta múltiple, y el contenido de esas preguntas, que se ha de extraer del consenso de programas que se estudian en las facultades, todo ello adobado de una parte de casos clínicos con imágenes y algunas preguntas sobre habilidades comunicativas, ya que todavía no se puede hacer una ECOE.

      Puede que no sea lo ideal, pero es lo posible y medible, tu alternativa es irreprochable pero ha de formularse para que se pueda realizar con garantía de consenso.

      Salvo mejor criterio.

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    2. Gracias por tu comentario, muy interesante, pero.... siempre hay un pero. Dotar de total credibilidad a los test nunca me ha parecido correcto. La estadística, una ciencia creada por el hombre para medir todo lo que se nos ocurra. Y, aunque muchos se me puedan echar encima, soy de la opinión que la estadística es la ciencia del absurdo: mido lo que quiero medir y además, como se que puedo fallar, me busco errores para hacer válida mi medición ¿? Pero me quito el sombrero ante el señor que se le ocurrió y que fue capaz de crear toda una escuela y fieles seguidores y defensores de su doctrina que ha llegado hasta los tiempos de hoy.

      El MIR, tal y como está planteado actualmente no mide nada de lo cualitativo, ni por más imágenes ni preguntas de ética que pongan. La ética es ética y esa si que no sigue una norma estricta.

      Y ese es el gran punto, hacer ECOE para poder valorar muchas más cosas, hacer exámenes orales, escritos, tipo test pero con sentido no en el "sinsentido" por el que se caracteriza este examen.

      Y, además del MIR, hay que valorar la calidad de los centros docentes. Tanto protocolo y formas que se le exigen al MIR creando comisiones para todo y luego se olvidan de hacer grandes seguimientos en los centros docentes. El Ministerio no debería quedarse tranquilo con entregar el programa hecho desde el año 2006 a cada hospital y se acabó. Estoy totalmente en contra. Se deberían hacer evoluciones de cada residente con exámenes a mitad de residencia y el que lo supera pasa al siguiente nivel. ¿Qué es eso de que te vayan firmando una hoja conforme estás aprobado si el que te la firma no te ha visto ni un día en el servicio? ¿De qué sirve que te firmen una rotación de la que ellos mismos te han dicho vete de vacaciones que ahora somos pocos y no podemos estar por vosotros? Y mil y una que podría contar.

      Ahora, que estamos en un momento de gran crisis, momento en el que se está cuestionando la viabilidad del sistema sanitario sería el momento de sentarse, reflexionar, coger las cosas buenas y empezar de cero, empezando por la remodelación de las facultades de medicina y acabando por todos los médicos. El momento es idóneo otra cosa son el tener ganas de hacerlo.


      Saludos y gracias por leer los comentarios

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  2. ¿Se puede decir quién es el que acredita ante notario los resultados? :p

    Buen artículo.
    Y es cierto que sería complicado encontrar un sistema mejor, sin ser este perfecto.

    Con respecto a lo último, por transparencia podría hacerse, aunque tampoco sé si tiene mucho sentido. "Sólo" conozco a 4 personas que se presentaban al MIR este año, aunque sé que no es estadísticamente significativo mi sondeo... jeje, todos ellos pertenecían a facultades distintas, dos de ellos coincidieron en una de las academias, los otros dos, en dos academias completamente diferente. Y aunque con variaciones, todos calculan estar entre los 700 primeros (uno entre los 200, otro entre los 300 y otros dos por encima del 700)
    Buenos alumnos y estudiosos. Poco significativo, ya lo sé... pero normalmente quien va bien en la facultad, sea la facultad que sea, y quien se prepara el MIR en condiciones (sea la academia que sea), suele tener unos resultados de acorde a lo anterior, con ciertas variaciones.

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    1. He conocido algún caso como vosotros, que comienza a familiarizarse con el mundillo MIR a partir de tercero de carrera o antes, hay quien lo critica, a mi no me parece mal siempre que no descentre de lo importante en la facultad.

      Conocer las referencias por otros, por seguirle la pista como hacéis vosotros, eso es como aprender a andar a gatas, hay que hacerlo, el cuando lo decide cada uno, no se trata del contenido, sino del continente, que te suene el ambiente, el lenguaje, la metodología.

      Todo eso que llevas ganado, hoy en día además facilitado por la tecnología y los medios de acceso, bases de datos, blogs, etc. a través de la red, esa misma facilidad te llevará a contestarte tu mismo la pregunta que haces.

      En cuanto a los ejemplos que tu pones, son todos ellos excelentes y algunos también conocidos por mi, al menos eso sospecho por este mundillo virtual.

      En cuanto a algo más representativo te recomiendo que repases las tablas gráficas de nubes de puntos que he subido, cada punto representa a una persona real que ha realizado el MIR en la convocatoria que representa.

      Las nubes referidas son pura descripción de la relación existente entre netas (eje de las Y) y baremo académico (eje de las X), ahí se ven dos variables y su ruido de fondo, es decir su correlación y su no correlación.

      Pura descripción que no inferencia, para sacar consecuencias, cada punto un médico con su resultado, el resto del discurso lo pone cada uno, como una radiografía.

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  3. Muy interesante todo lo expuesto relativo a si habria altenativas al Mir...creo firmemente, dentro de mi ignorancia, que los genios del area de salud habran de adecuar todo este maremagnun o iceber en que se ha convertido este episodio que los medicos enfrentan año tras año...Sin embargo quienes cada vez son mas perdidosos, son los medicos extracomunitarios. Esto obviamente, nos llevaria a preguntar con todo respeto ¿son necesarios los extracomunitarios para seguir recibiendo este trato cada vez mas excluyente?.Por supuesto, que nadie pediria un trato igualitario, pero cietamente que ese 8% no es mas que una forma de decir NO MAS a cientos y cientos de ilusos...Lo siento pero es mi humilde opinion, y, espero no ofender con la misma

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  4. Pequeños cambios pueden ayudar mucho a mejorarlo, como sustituir las hojas de respuestas nominadas y de corrección manual, por hojas identificadas con códigos de barras y corrección automatizada.
    A saber cuáles son los objetivos de este método tan desactualizado.

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  5. Hola a todos!
    una consulta estoy obligada a presentarme al hospital antes del dia 20?
    o con que me presente el mismo dia estara bien?
    pasara algo si no voy antes de ese dia?

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    1. El plazo de posesión es el día 20-21

      Si no lo haces pierdes la plaza, salvo que te concedan prórroga por causa mayor, lo que previamente has de solicitar de forma razonada y justificada en tu hospital o unidad docente y ellos la cursan al Ministerio que es quien la concede de forma excepcional.

      En la convocatoria dice plazo improrrogable (20-21 de mayo este año)

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    2. gracias por tu respuesta Gangas, eso le he leido en el BOE, pero me referia a otra cosa por que escucho que muchos se presentan unos dias antes del dia 20 , y como no me encuentro en la ciudad que me ha sido adjudicada , queria saber si los que se presentan antes de la fecha estipulada empieza antes la formacion?

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    3. No, no es necesario, con el 21 es suficiente, será la fecha de los contratos, también lo dice la convocatoria.

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  6. Soy extranjero y me parece muy interesante lo expuesto por parte de uds,disculpen mi ignorancia pero creo que parte del problema que se da es por lo economico, el ministerio debe de asegurarse que los recursos que invierte brinden resultados eficientes. Por otra parte que tanto puede medir los conocimientos un examen? Donde despues de casi un año de estudio llegas cansado, agotado y muchas veces frustado, la presion psicologica es inmensa y no todas las personas la asimilan de la misma manera, mala suerte para unos pero cruda realidad que se da.En plena era de la Tecnologia y la informacion que un examen consista en quien retiene mas conocimiento como si fueramos maquinas, me parece una ofensa al intelecto considerando que jamas medira tus verdaderas habilidades. Pero que sucederia si se estableciera un determinado numero de cupos que en relacion a sus notas se les pagara su residencia y a otra parte de medicos, excelentes medicos que no lograran estar dentro de los primeros lugares se les permitiera hacer su especialidad, trabajar r el deseo de estudiar lo que desean, pero sin el beneficio de recibir una remuneracion, seria justo. En el caso de los extranjeros me parece justo ya que si hacemos un estudio economico de cuanto dinero entra a España por medico extranjero que prepara el MIR es una cantidad de dinero importante, sin contar los colaterales que trae a un pais que esta en crisis que necesita INVERSION y que entren divisas para poder dar oportunidad de empleo a sus ciudadanos.

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  7. Hola Gangas, te quería preguntar si has escuchado algo sobre la sanción para quienes renuncian pronto a su plaza... es que he oído que salió en la página del boe, pero he estado buscando y no encuentro nada, gracias!

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    1. Pues yo espero que haya alguna sancion para los que quieren renunciar ahora porque han cogido las plazas que quizas otros hubieran aprovechado..y por que?? por 3 meses de sueldo???

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  8. por el momento no la hay
    mas información en
    http://www.casimedicos.com/foro/2013/tema19943.html

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