La propuesta, realizada en otras entradas, de fijar los FACTORES EXAMEN (0,1) y BAREMO (5), iguales para todos lo años, tendría la consecuencia en las dos primeras gráficas de que pudieran ser ya PUNTOS FINALES desde su nacimiento porque el multiplicador correspondiente (FACTOR), ya fijado previamente, las transformaría automáticamente en unidades sumables y comparables.
Por todo ello para hablar en PUNTOS FINALES no sería necesario esperar a los resultados de la prueba por aquello de la media de los diez mejores exámenes y diez mejores baremos, que es lo que hace distintos a los FACTORES cada año ya que esa media de la que derivan no es idéntica todos los años y ahí nace el problema que se pretende señalar.
No habría más variables que el examen, el baremo y la población, y una sola relación fija entre examen y baremo (75/25) cada año y entre años, adiós a la distorsiones, siendo la consecuencia una equivalencia fija de NETAS por DÉCIMA de EXPTE (N ≡ D) = (1,66666666666), las ventajas serían de fondo (mayor equidad) y de forma (antes y durante la preparación, las referencias para fijar objetivos y hacer su seguimiento serían más claras, no se si se dejaría de hablar en netas y expte pero desde luego su transformación en PUNTOS FINALES de examen y baremo sería automática y previa al final de la prueba).
Lo que vale en PUNTOS FINALES el baremo 1,0000 es lógicamente el valor del FACTOR BAREMO ya que es su multiplicador de transformación, cada año es distinto por obtenerse de la división de 25 por la media de los diez mejores baremos cuya probabilidad de ser iguales de un año para otro es reducidísima, el mismo razonamiento es aplicable al caso del examen.
Las formas de la primera gráfica y de la segunda serían diferentes acercándose a la tercera que no es más que la suma de las dos primeras (NETAS y BAREMO) transformadas por los FACTORES, cada una por el suyo, en PUNTOS FINALES de examen y baremo, ya sumables y convertibles en PUNTOS TOTALES, es decir la tercera que representa el RESULTADO DEL MIR.
Por todo ello para hablar en PUNTOS FINALES no sería necesario esperar a los resultados de la prueba por aquello de la media de los diez mejores exámenes y diez mejores baremos, que es lo que hace distintos a los FACTORES cada año ya que esa media de la que derivan no es idéntica todos los años y ahí nace el problema que se pretende señalar.
No habría más variables que el examen, el baremo y la población, y una sola relación fija entre examen y baremo (75/25) cada año y entre años, adiós a la distorsiones, siendo la consecuencia una equivalencia fija de NETAS por DÉCIMA de EXPTE (N ≡ D) = (1,66666666666), las ventajas serían de fondo (mayor equidad) y de forma (antes y durante la preparación, las referencias para fijar objetivos y hacer su seguimiento serían más claras, no se si se dejaría de hablar en netas y expte pero desde luego su transformación en PUNTOS FINALES de examen y baremo sería automática y previa al final de la prueba).
Lo que vale en PUNTOS FINALES el baremo 1,0000 es lógicamente el valor del FACTOR BAREMO ya que es su multiplicador de transformación, cada año es distinto por obtenerse de la división de 25 por la media de los diez mejores baremos cuya probabilidad de ser iguales de un año para otro es reducidísima, el mismo razonamiento es aplicable al caso del examen.
Las formas de la primera gráfica y de la segunda serían diferentes acercándose a la tercera que no es más que la suma de las dos primeras (NETAS y BAREMO) transformadas por los FACTORES, cada una por el suyo, en PUNTOS FINALES de examen y baremo, ya sumables y convertibles en PUNTOS TOTALES, es decir la tercera que representa el RESULTADO DEL MIR.
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